La historia
Un poco
De nuestra historia
En Finisterre, allí donde se vienen a encontrar la Playa Langosteira y la Punta de San Roque se sitúa Tira do Cordel, enclavado en un entorno costero privilegiado
El local en el que se encuentran los fogones y salones de Tira do Cordel había sido, allá por 1812, una fábrica de salazón. Años después, ya en el último cuarto del siglo pasado fue cuando nuestra familia empezó, en el viejo local de la fábrica, a cocinar pescados y mariscos, siempre de las salvajes costas de Finisterre, en el establecimiento que luego habría de llevar el ahora célebre nombre Tira do Cordel.
Siempre nos resulta interesante recordar la anécdota a la que debe su nombre nuestra casa. En los primeros años de actividad en nuestro local, la puerta principal, de postigo, tenía un curioso mecanismo por el cual se abría tras tirar de una cuerda. En la medida en que muchos de los que acudían allí no encontraban la manera de franquear la entrada, a uno de los propietarios, se le ocurrió la idea de escribir en la misma puerta un mensaje que decía “Para entrar, tirar do cordel”. De ahí surgió nuestro nombre, el que nos ha identificado desde entonces.
Con el paso de los años, siguiendo siempre una estricta disciplina de trabajo, un cuidado gusto por la calidad y por el origen autóctono de los productos que se llevan a la mesa, y respetando la tradición en las técnicas culinarias empleadas, nuestro local se convirtió en el establecimiento actual, restaurante de referencia en su sector.
Y es que en esta casa siempre hemos entendido que los más preciados logros que se pueden alcanzar son la aceptación y disfrute de nuestra propuesta gastronómica, reconocimiento que siempre hemos concebido como de obligada consecución por nuestra parte.
Nuestras especialidades ofrecen una experiencia única al comensal que desee saborear el gusto de los mejores productos de la Costa da Morte, tanto por su frescura y calidad, como por su cuidada preparación.
De este modo, y siempre desde la elaboración de una cocina de producto, respetuosa con la sublime calidad que ofrecen los productos de la zona, en Tira do Cordel el comensal podrá disfrutar de un amplio abanico de posibilidades gastronómicas, siendo el plato insignia la célebre lubina, o robaliza, en gallego, a la brasa.
Tal y como se procede con todo pescado a la brasa que sale de nuestras parrillas, seleccionamos los más nobles ejemplares, éstos son cocinados a la parrilla sobre brasas de carbón vegetal, se desespinan y son servidos recién salidos del fuego, con un toque de la salsa artesanal que ya es marca de la casa. Se trata de un plato que, desde hace años, ha hecho las delicias de los más distinguidos comensales.
Asimismo, en Tira do Cordel ofrecemos otras especialidades, como las zamburiñas, el longueirón o las almejas a la marinera de la casa, además de bogavante, centolla o percebes, entre otros.
Al igual que los productos propios del mar, la enjundia de nuestras carnes es majestuosa, tanto ternera como vaca, y en su preparación reciben un exquisito trato por parte de nuestros cocineros y cocineras.
Por supuesto, para degustar nuestras especialidades, el comensal que así lo desee tiene a su disposición una magnífica variedad de vinos de un amplio abanico de denominaciones de origen, ya que la selección de caldos que integra nuestra bodega ha sido cuidadosamente estudiada para ofrecer un acompañamiento a la altura, sea cual sea su elección para comer.